Recién este lunes, a una semana de haber encontrado los destrozos en el Dispensario de Malabrigo, el tapicero prometió pasar el presupuesto del trabajo que debe hacer.

Hace siete días que el centro de salud está cerrado y posiblemente siga en esa situación hasta el jueves o viernes de esta semana. 

La intención de la Subsecretaría de Salud es ir habilitando consultorios a medida que el tapicero vaya reparando los muebles. 

Todas las camillas y sillas, además del sillón de odontología, están tajeados. 

Además, la Municipalidad deberá reponer siete monitores con sus respectivos teclados y mouses. Los CPU no sufrieron daños. 

El pasado jueves, con los datos investigados, la Policía hizo un allanamiento en Malabrigo y secuestró un teléfono celular, las llaves de las puertas del dispensario y blisters de pastillas varias.

El hecho está caratulado como "Daño calificado".