El Intendente Gustavo Brandan tomó la decisión de reestructurar el organigrama con una fuerte medida: disolver la Secretaría de Control y Fiscalización, que dependía de Matías Roldán desde hace cinco años.

Las funciones y áreas de incumbencia de esa ex dependencia se repartirán en más entre otras tres secretarías, ya vigentes.

El Departamento de Tránsito quedará en manos del propio Roldán y dependerá de la Secretaría de Coordinación, a cargo de Alejandro Chalub.

A su vez, la Subsecretaría de Ambiente seguirá a cargo del Ing. Agr. Eduardo Angulo y  pasará a formar parte de la Secretaría de Gobierno, dependiente de Paola Nanini.

Por último, el Departamento de Bromatología seguirá a cargo del Prof. Adrián Zapata, formando parte de la Secretaría de Administración, coordinada por Miguel Pérez.

Según un comunicado difundido por la Municipalidad, "las modificaciones se enmarcan en la necesidad de adecuar el funcionamiento de las distintas áreas a la realidad actual, signada por la pandemia, y de mejorar la organización interna del equipo de gobierno para dar respuesta a las demandas de los vecinos".

El intendente destacó que podrá disponer en las próximas semanas nuevas modificaciones.