La historia de la Capilla de Fátima, contada por Blanca Cragnolini

Cada 13 de mayo, la comunidad católica de Puesto Viejo vive una fiesta en honor a su patrona, la Virgen de Fátima.
Hoy a las 19 se hará la Misa y luego la procesión de antorchas como se viene desarrollando hace casi 70 años.
Es que en 1965 comenzó la construcción de la capilla, por iniciativa de Oliva Patat de Denardi, que donó un sitio sobre la calle 124, a metros del cruce con la 72, exclusivamente para que el barrio rural tenga su capilla y que la gente tenga un lugar de oración más cercano que el templo del Lote XV.
Apenas se concretó la donación, toda la comunidad aportó para levantar el edificio. Al año siguiente se inauguraría.
Para Blanca Cragnolini, la capilla es como su casa.
Su nono Francisco fue el primer presidente de la Comisión que se encargó de la construcción.
Su padre Santiago fue el que donó la imagen de la Virgen de Fátima como un agradecimiento por haberle salido la jubilación. Que sea esa María fue un pedido de los Padres Pasionistas, que veían que en el país no había templos o capillas en su honor, pese a que en el mundo se hablaba de las apariciones a los pastorcitos portugueses.
Su madre, Delia Sangoy de Cragnolini también fue Presidente de la Comisión.
El primer casamiento en la flamante capilla fue el de Blanca con Juan Carrizo.
Hoy sigue cantando en el coro junto a su hijo Lito y su nieto.